Vida

Dos árboles están creciendo

en el jardín de mi vida,

aún no tienen raíces

sólo hojas verdes y finas.

Al llegar la primavera

sus tallos florecerán,

echarán frutos pequeños

que pronto madurarán.

Un roble y un almendro

protegen sus tiernos tallos,

del invierno, duro y frío,

y del calor del verano.

Los protegen de los vientos,

de la lluvia y del sol,

les ahuyentan los insectos,

que vuelan alrededor.

El roble les da su fuerza

para cuando sean mayor,

el almendro les da flores,

es más tierno con los dos.

A los árboles pequeños

también les gusta jugar,

mueven sus ramas al viento

¡ten cuidado o te romperás!

Acerca tu tallo al roble,

él te da seguridad,

que el almendro también es débil,

sólo amor te puede dar.

Cuando crezcan estos árboles

tendrán su propio hogar,

otros árboles pequeños

a quien proteger y amar.

Y en el jardín de la vida

envejeciendo sus troncos están,

un roble y un almendro

sin nadie a quien cuidar.